Quedé con mi abuelo en la Plaza del Rey, aún me acuerdo como si fuera ayer mismo. Me sudaban las manos como cuando un adolescente se enfrenta por primera vez en su vida a un examen final. Me dijo con su tono serio y firme: "No se si me van a dar la túnica, pero si está Cristobal, algo hará"
Entramos por el cancel de la Iglesia Mayor, observé primero a ella y a continuación a él. En el camino corto que lleva desde sus altares a la cueva, le pedí a ambos que hicieran todo lo posible para poder acompañarlos en esa madrugada, en la de 1993. Mi abuelo se adelanto, yo me escondí detrás de él. Allí en la sacristía se encontraba D. Cristobal Valle, que dejó lo que estaba haciendo y exclamo: "¡Hombre Rafael! ¡Aquí esta el nieto de Rafael, Fernando!
Sí, Fernando, Don Fernando Vela, amigo mío personal y uno de los mejores consejeros que he tenido en mi vida. ¡Lastima que te fuiste Fernando! ¡A mas de uno le hubieras "dao" un cachetón en estos tiempos y muchas cosas no estarían pasando!
Fernando Vela, me miró y se dio cuenta de mi corta estatura, fijo su mirada en Cristobal y este dijo: "Rafael no te preocupes que sino hay túnica "pa" tu nieto, yo te doy la mía y que tu hija se la arregle. Tu nieto salé esta MADRUGÁ con el VIEJO". Un calor súbito se aferro a mi cuerpo, las palpitaciones se adueñaron de mi y no era capaz de centrar mi mirada en nada ni en nadie. Solo pensaba en cruzar la puerta de la Iglesia, entrar en el almacén de la Hermandad y que me dieran "MI TUNICA".
Fernando Vela, que estaba arreglando unos ramitos de flores, que posteriormente colocaría a los titulares, apostilló: "SI OME, NO VA A VE TUNICA PA EL CABRERITA CHICO, SI YO CONOZCO AL PARE". Dejó lo que estaba haciendo, Cristobal se despidió de mi abuelo y de mi y nos fuimos junto a Fernando hacia la Casa de Hermandad. Una amalgama de olores, sentimientos y recuerdos iban inundando mi mente. ESTABA A PUNTO DE SALIR COMO PENITENTE EN EL NAZARENO.
Llegamos a la Hermandad, allí el ambiente sabía a humedad y a cera. Fernando, decidido, abrió una caja, me miró y soltó: "Ni te la pruebes, ¡esta es la tuya!" Mi abuelo desplegó la túnica y poniéndomela por encima dio su aprobación. Como cuando una madre tiene en sus brazos a su hijo, así cogí la bolsa verde en la que iba metida ella, MI TÚNICA DEL NAZARENO. No daba crédito a los que mis ojos estaba retransmitiendo en directo ante mi.
Fernandito, con ese ARTE innato que le caracterizaba, procedió a hacerme la ficha de inscripción y cuando le dije la dirección en la que vivía, apunto lo siguiente: "¡Calle San Tiago! ¡Qué santo mas raro joe! A lo que yo le respondí: "No Fernando, Calle Santiago, todo seguido, sin separar San de Tiago. Mi abuelo, Fernando y yo empezamos a reirnos sin parar y esta anécdota la recordaba muy a menudo con mi amigo Fernando, cada vez que nos acordábamos el uno o el otro.
Este gran día, acabó en el mítico BAR "EL AGÜAERO", que estaba situado al lado de la Casa de Hermandad. Allí mi abuelo Rafael, invitó a una cervecita a Fernando y también como no a D. Antonio Quiñones, que se unió a nuestra tertulia, en la cual me dio muchos consejos sobre la madrugá. Recuerdo que me dijo que al capirote de cartón, le hiciera agujeritos y así el fresquito de la noche y del alba, me refrescaría durante todo el recorrido. Así lo hice y... ¡que bien me lo pasé!
Amig@s he querido plasmar este relato de mi primera experiencia en la Hermandad, para que quede constancia que no llevo ahí dos días y que entré por la puerta grande y QUE ME VOY POR LA PUERTA DE LA LIBERACIÓN Y DE LA CONVICCIÓN. Seguro que se me olvida nombrar a muchísima gente BUENA que me encontré por el camino, al igual que se me olvida citar a muchísima gente MALA, que desgraciadamente también me he topado con ellas. Cada cual sabe que papel juega en mi vida en estos instantes, no hace falta mencionar a nadie.
A partir de esta primera toma de contacto, comienza mi montaña rusa en la Hermandad. Serían innumerables los relatos que me han acontecido a lo largo de "VEINTIDOS AÑOS". Sí habéis leído bien, "VEINTIDOS AÑOS", algunos con dos, tres o cuatro años, se jactan de NAZARENO, DE "PAPA LARDI"O DE "VETERANÍA".
He tenido momentos de alegría, instantes de tristeza, me han ubicado incluso en sitios de"LUCECITAS" luciendo uniforme de la HERMANDAD, JAJAJAJAJA, (QUE NEFASTA ES LA ENVIDIA), pero nunca, nunca, nunca, han podido hundirme. Tan solo me pudisteis callar debajo del paso, por un castigo que me impusisteis y que una vez más disteis cuenta de como coartáis la libertad de expresión, ya que sino estaba con vosotros, no podía seguir siendo MIGUELITO CABRERA debajo de MI LOLA, sino que me tratasteis como un "APESTADO".
Me llamareis de todo…. ¡Que esto de irme es de "cobarde"! ¡Que esto es lo que yo quiero a mis titulares! ¡Que ellos no tienen culpa de nada…!
Amig@s sometid@s, ¿No os dais cuenta que sois reos de vuestro ego? Quitaros ese lastre, dejad el egocentrismo e intentad ser fieles a vuestra voluntad, que no es semejante a "FORZAR LA VOLUNTAD", que es lo que estáis haciendo.
No me vendais eso de… "LO IMPORTANTE ES ESTAR AHI ABAJO" "HAY QUE ADAPTARSE A LOS TIEMPOS"
Muchisim@s de vosotr@s habéis despellejado e insultado delante MIA "AL QUE AHORA OS DA DE COMER". Eso que habéis efectuado y perdonadme que os lo diga, es de "NO TENER PERSONALIDAD" y no me volvais a vender eso de… "ES QUE YO YA CON ÉL ARREGLÉ LO QUE TENÍA"
¡Que linea más fina existe para vosotr@s del AMOR AL ODIO!
He dejado a un montón de "HERMANOS", que por seguir diciendo "YO CARGO", han preferido tirar al estercolero una amistad de años, por perdurar ahí y seguir luciendo el chandal… ¡ESA ES LA ÚNICA PENA QUE ME LLEVO AL IRME!
ASÍ QUE...
- ME VOY PORQUE NO ME SIENTO REPRESENTADO POR LOS ACTUALES MIEMBROS QUE "DIRIGEN" A MI QUERIDA Y AMADA HERMANDAD, AUNQUE EL QUE LA LIDERA EN LA SOMBRA NO SEA NI MIEMBRO DE LA JUNTA.
- ME VOY PORQUE NO ACEPTO QUE AL VIEJO Y A LA LOLA LO CARGUEN DE ESA MANERA.
- ME VOY PORQUE NO HABEIS JUGADO LIMPIO Y LO SABEIS.
- ME VOY PORQUE AMO LA LIBERTAD, LA PLURALIDAD Y NO COMPARTO LAS AMENAZAS, EL ACOSO Y LAS DISTINCIONES.
- ME VOY PORQUE YA ESO NO HUELE A NAZARENO AÑEJO, A LOLA DE PALIO ANTIGUO, A VOCES DE "VELLITOS DE PUNTA".
… Y ME VOY PORQUE UN "PECADOR" Y "PRESUNTO" COMO YO, NO TIENE CABIDA ENTRE TANTO "CRISTIANO MODELO"
TIC… TAC… TIC… TAC… ESPERANDO AL COBRADOR...
… Abuelo perdóname, ¡te juro que algún día volveré!